Los mosquitos al acecho
Como lo comentamos en un capítulo anterior, el hombre a derribado barreras naturales en la selva abriendo caminos para que enfermedades como el Evola, la Malaria, el Dengue y la enfermedad del por virus del Nilo pueden a través de vectores como son los mosquitos, que pueden viajar a diferentes zonas e infectar humanos y animales al picar, succionar y luego depositar en el interior de nuestro cuerpo estos gérmenes capaces de enfermarnos.
Hace 5 días recibí un paciente que una semana antes estuvo viajando por la zona selvática de Chiapas, al que le fue asegurado que no había enfermedades transmisibles por mosquitos en la zona y que finalmente al regresar de México, presenta un cuadro febril con ataque al estado general, nauseas, vómito y postración.
Al revisar los antecedentes pudimos constatar primero su visita a Guatemala, posteriormente, las múltiples picaduras de mosco que sufrió y finalmente el cuadro resultante unos días después.
Tuvo un cuadro clínico que como mencioné se caracterizó por fiebre la cual se presentaba un día sí y uno no, con un escalofrío difícil de pasar desapercibido ya que el paciente prácticamente saltaba de la cama y vibraba con tal intensidad que alarmaba a los acompañantes, para posteriormente llegar a alcanzar niveles de temperatura de hasta 40 grados centígrados.
Cuando ingresó al hospital una de las sospechas era el Dengue indudablemente, los exámenes de laboratorio no esclarecían el origen del mal, y fue, hasta que observamos el escalofrío previo a la fiebre que sospechamos la presencia de Paludismo o Malaria, solicitamos examen de gota gruesa en sangre durante la fiebre y Eureka, nos reportaron un plasmodium presente en el organismo del paciente.
La característica de este parásito es que se alberga en los glóbulos rojos, donde alcanza su fase de madurez para luego reventar le glóbulo rojo y liberarse en la sangre donde vuelve a infectar glóbulos rojos y repetir el ciclo, razón de la presencia de fiebre cada determinado tiempo, cada 2 días, cada 3 días o cada 4 días dependiendo del tipo de plasmodium.
Las variedades son Plasmodium Vivax, Plasmodium Ovale y Plasmodium Flaciparum. El primero es el más común y el más fácil de resolver, los otros se pueden complicar generando un cuadro agudo y que puede ser mortal o, establecerse en el organismo con tal resistencia que puede permanecer indefinidamente sin lograr erradicarse, ameritando tratamiento continuo.
Debido a la rareza del caso últimamente en nuestro país la tipificación del palsmodium se hace solamente en el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológico, donde se tardan un promedio de 5 días en entregar el resultado, es imprescindible tenerlo ya que nos ayuda a establecer el pronóstico de curación.
Alarma la presencia de este germen ya que con frecuencia los mexicanos viajamos a esta zona y desde luego a la zona de Chiapas, donde colindamos con Guatemala por lo que no duden que en un futuro tengamos nuevamente entre los viajeros al Sur del país a la bella zona de Montes Azules, Escudo Jaguar, Palenque y Cd. Cuauhtemoc,. Brotes de la enfermedad que tan eficientemente se transmite a través del mosquito Anófeles.
Si viajas a zonas selváticas toma precauciones como llevar protector contra moscos en buenas cantidades, aplicarlo cada 4 horas y si te metes al agua repetir la dosis, no dejar sitio sin aplicación no usar ropa delgada ya que puede picar a través de la ropa, dormir con mosquitero, no escatimar si es necesario en el uso de insecticida en la habitación donde se dormirá y usar pijama con calcetines en las noches.
Si viajas a zonas selvática donde se sospeche que hay riesgo de contagio debes tomar tratamiento para protegerte contra el contagio.